
Por Gustavo Díaz
Desde tiempos remotos el ser humano tuvo una fascinación por el cielo. Lo hizo para viajar por los mares, para saber cuándo sembrar y cosechar, imaginó dioses, creó calendarios, adoró a los astros y planificó sus guerras basándose en la ubicación de los mismos. Hoy, observar al cielo se ha convertido en una de las actividades más elegidas por los turistas que quieren saber un poco sobre el cielo que los cubre. Astroturismo: un viaje a las estrellas.
Postdata participó de una noche de astroturismo en el marco del Día Internacional del Turismo que se conmemoró este 27 de septiembre. La actividad, organizada por la Secretaría de Turismo, comenzó con la caída del sol y se realizó en Salinas del Bebedero junto a las inmensas parvas de cloruro de sodio que allí se acumulan.
Mientras las pupilas de los presentes se acostumbraban a la noche espesa y las estrellas parecían brillar cada vez más, los guías profesionales y expertos en astroturismo: Fernando Massa y Alejandro Insaurralde, brindaban una explicación detallada de lo que observábamos, mientras todos, en silencio, observabamos extasiados tanta belleza sobre nuestras cabezas.
Es que seguramente a muchos les pasó que la última vez en ver el cielo así fue en la niñez. Esta noche, nuevamente pudieron volver a disfrutar esto, con la tranquilidad necesaria, en el lugar correcto y con dos especialistas que no dejaban detalle librado al azar.
“Los planetas no titilan, las estrellas sí”, tan simple como eso. Pero no muchos lo sabíamos. El trayecto del sol, la cruz del sur y cómo guiarnos en caso de no tener una brújula o aplicación en el teléfono para salir de un apuro. Las constelaciones y cómo los antiguos habitantes del mundo estudiaron a los astros para iniciar las épocas de guerra o de cosechas.
El cielo siempre fue el origen de muchas cosas. De allí nacieron los signos zodiacales, los nombres de los días de la semana y las plegarias, historias asombrosas, y el pedido de los deseos ante cada estrella fugaz que atravesaba la noche oscura.
Fernando y Alejandro nos comentaron cómo y qué vieron los habitantes antiguos de oriente u occidente las figuras que recrean las estrellas y planetas en el cielo. Para nosotros la constelación zodiacal de escorpio se denomina así por la similitud a un escorpión, pero por ejemplo para los chinos, no es más que un gran dragón.
Después de un apasionante viaje a las estrellas, la delegación se tomó imágenes con el cielo de fondo y jugando entre las luces de colores alrededor que recreaban imágenes varias.
Camino a los vehículos, muchos se daban vuelta para mirar nuevamente el cielo. Tan atrapante como místico, todos aprendimos un poco más sobre el manto de estrellas, soles y planetas que nos cubren y nos iluminan noche, tras noche.
Por Gustavo Díaz
Fotos: Miguél Acosta – Secretaría de Turismo.