No dejaron nada. Se robaron placas, cruces y floreros de bronce del cementerio. No es la primera vez que ingresa a robar en el lugar. Malestar de las familias por la poca seguridad del lugar.

El último robo sucedió el pasado viernes en el Parque Los Álamos. Solo esa noche se llevaron 262 cruces y luego en otro robo se alzaron con 239 floreros de los nichos.
Julio Deluret, en declaraciones a El Chorrillero manifestó que en más de 30 años de trabajo, nunca les había pasado que “se pierda una placa o cruz”.
Lo cierto es que día a día crece el robo de placa de bronce, como así también de cables.