El próximo 15 de junio se celebra el Día del Padre y el comercio se prepara para una fecha clave en el calendario de consumo.
Con expectativas moderadas pero positivas, comerciantes y analistas del consumo anticipan que el gasto promedio por regalo para el Día del Padre 2025 rondará los $72.000, según relevamientos realizados por cámaras del sector y consultoras privadas.
Consultados sobre qué le van a regalar a papá en su día, y en los primeros puestos se encuentra: Indumentaria 35%, Experiencias (Cena, Día de campo, entre otros) 22%, y Vinos y Licores 14%. Luego le siguen en menor proporción: Herramientas 6%, e Informática, TV y Video, al igual que Perfumería 5%. Artículos deportivos, Marroquinería, Joyería/Relojería, Librerías, Calzado, Smartphones, Regalería, y Artículos para el hogar y usos particulares, entre 0,5% y 3%. Si bien los consumidores muestran cautela a la hora de comprar, muchos planean realizar un esfuerzo adicional, priorizando la calidad o el simbolismo del obsequio.
Desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) estiman que esta fecha podría significar un alivio para los comercios minoristas, especialmente en rubros como indumentaria, perfumería y electrónica. “Hay un repunte en la intención de compra respecto a 2024, aunque todavía lejos de los niveles prepandemia en términos reales”, señalaron desde la entidad.
Por su parte, plataformas de comercio electrónico como Mercado Libre informaron un aumento en las búsquedas y ventas en categorías relacionadas con regalos para padres, con un ticket promedio que oscila entre $60.000 y $80.000 dependiendo del rubro.
Además, se observa una tendencia creciente hacia los regalos personalizados y las experiencias: cenas, escapadas de fin de semana o actividades compartidas ganan terreno entre los más jóvenes, que priorizan momentos significativos por sobre objetos materiales.
El Día del Padre se presenta así como una oportunidad tanto comercial como afectiva. Aunque los bolsillos siguen ajustados, muchos argentinos apuestan a celebrar con algún mimo especial. Los comerciantes cruzan los dedos: el clima, las promociones y las decisiones de último momento serán claves para definir si esta fecha deja un sabor dulce o amargo en las cajas registradoras.
